El idioma nos unió por casualidad
El post de hoy es muy especial. Como a casi todas las personas nos gustan las historias de amor, hoy te traigo una de dos de mis estudiantes más queridos: JohnE y Christiana.
Como fui testigo de sus avances en el idioma a través del tiempo y de algunos capítulos de sus vidas, me emocioné con cada palabra que leí. Ya me dirás qué te parece lo que nos cuenta Christiana en este artículo del blog.
«Me llamo Christiana y soy de Chipre, una isla pequeña en el mar mediterráneo. Desde muy joven, me han fascinado el universo y sus misterios. Por eso, en 2010 empecé a estudiar la carrera de Física Teórica.
En 2014 terminé mi doctorado en el Imperial College en Londres y desde entonces me dedico a hacer investigación en el campo de la Teoría de Cuerdas y de los Agujeros Negros. Por trabajo he viajado por todas partes del mundo para dar charlas, asistir a conferencias y para colaborar con otros científicos.
Gracias a este camino que tomé, tuve la oportunidad de conocer a unas de las personas más inteligentes de nuestra época, como Stephen Hawking y de vivir en diferentes países como España.
Viviendo en Barcelona
Llegué a Barcelona en el otoño de 2014. Había estado una vez antes por turismo y me enamoré tanto de la ciudad que soñaba con mudarme allí algún día. Cuando llegó ese día no pude estar más contenta, pero después de unas semanas, esta alegría se convirtió en ansiedad.
No podía comunicarme con casi nadie, además de mi jefe y mis colegas, dado que la mayoría de los lugareños no hablaban inglés y mi nivel de español era muy bajo. Cosas básicas, como hacer la compra, eran grandes retos y esto me preocupaba bastante. Tenía que aprender el idioma lo antes posible.
Por eso, me matriculé en una escuela de idiomas que se llamaba ‘Speak Easy’. Éramos más de diez extranjeros en la clase. Todos eran muy buena gente. Salíamos de copas algunas veces y como lo pasábamos tan bien, así empezó nuestra amistad.
Entre todos, un chico irlandés, JohnE, llamó mi atención, y por pura casualidad le conocí, él era investigador de astrofísica. Todo pasó muy rápido y en cuestión de unas semanas ya éramos pareja. Al final, ‘Speak Easy’ no me ayudó tanto a aprender el idioma; sin embargo, fue un catalizador para conocer gente, hacer verdaderos amigos, tener una vida social fuera de mi trabajo y también me sirvió para encontrar un novio. El español que sé, se lo debo a Kirenia, una persona mucho más que una profesora para mí.
Así, JohnE y yo empezamos un viaje maravilloso juntos, con la compañía de muchos amigos. Decidimos entrenar nuestra habilidad para comunicarnos con los nativos, y disfrutar más de la ciudad. Para una persona tan activa como yo, Barcelona era un paraíso. Siempre había algo que ver y hacer, desde obras clásicas en el Liceu y «Cinema a la fresca» en Montjuic, hasta mercados alternativos y fiestas culturales en las calles de los distintos barrios.
Si no había ningún evento que nos apetecía, siempre teníamos la posibilidad de pasear por la playa para tomar el sol o salir a cenar. Pues, como podéis imaginar, con la agenda laboral muy llena y con la agenda social aún más ajetreada, ¡nunca nos aburrimos en Barcelona!
Los años pasaron muy rápido y en el otoño de 2017 mi contrato con la universidad se terminó. Tuve que mudarme a Inglaterra por trabajo. En esos meses, JohnE había conseguido un trabajo fuera de academia y como no era bueno para su carrera mudarse de país, tuvo que quedarse en Barcelona.
Los siguientes dos años fueron muy difíciles para nosotros. Vivir en Inglaterra me costó muchísimo y además vivir sin mi pareja me dolió mucho más. Invertimos mucho tiempo y energía para mantener nuestra relación viva. Viajábamos cada dos semanas para vernos y hablábamos por Skype durante horas y al final, lo conseguimos. Nos casamos hace unos meses y estamos muy contentos.
Viviendo en otra ciudad
Ahora, por fin, vivimos juntos en Dublín: una ciudad encantadora también, pero demasiado diferente. ¡Siempre te tendremos cerca de nuestro corazón, Barcelona! Echamos mucho de menos los paseos por el casco viejo y los vermut en plaza de Osca con amigos, pero nuestra tierra está aquí, donde vive nuestra familia. Barcelona fue una época maravillosa de nuestras vidas y no nos arrepentimos de nada, pero hay que seguir creciendo y soñando. Nosotros ya estamos en el siguiente capítulo juntos.»
Tengo que confesar que me he emocionado doblemente al leer esta historia de mis estudiantes. Primero porque he seguido de cerca sus vidas en estos últimos años y segundo, porque este tiempo que hemos compartido juntos me ha permitido ver cada uno de sus progresos en el idioma y a nivel personal.
Te cuento que estos chicos además de trabajar muchísimo cada semana en sus áreas, decidieron prepararse para hacer exámenes oficiales de español (DELE). Durante algunos meses tuvimos sesiones intensas de ejercicios para profundizar en los contenidos y mejorar su manera de escribir. Al final consiguieron la titulación oficial de nivel medio con muy buenos resultados. No puedo estar más orgullosa de todo lo que lograron juntos durante su experiencia en Barcelona.
Hoy viven en Irlanda otro periodo importante de sus vidas; sin embargo, no dejan de insistir en la idea de seguir practicando para no olvidar todo lo que aprendieron antes. Felicidades chicos por cada uno de vuestros logros. Gracias por estos años de preparación continua, por vuestra amistad y por compartir vuestra historia de amor mutua y con el idioma. ¡Un abrazo virtual grande a cada uno! Seguimos con nuestra charlas semanales por Skype:)
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